Rigoberto Salazar Velasco anunció que ayer presentó su renuncia con carácter irrevocable como secretario de Desarrollo Social de Colima.
«Dejo la dependencia gubernamental con la frente en alto, pues durante este tiempo me desempeñé siempre con ética y entregándome en cuerpo y alma a la noble labor de impulsar el desarrollo social en el Estado, con resultados favorables para la sociedad», informó a través de un comunicado de presa.
Comentó que la determinación del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) ha dañado su reputación, puso en peligro su vida y la de su familia, aunado a que ha recibido agresiones.
«Lamento todos estos acontecimientos porque soy un priista con carrera de partido y una militancia de cerca de 50 años, donde siempre he actuado bajo sólidos principios ideológicos, lealtad, ética política y estricto apego al marco de la Ley», añadió.
Deslindó al Gobernador del Estado, Mario Anguiano Moreno, de cualquier expresión que haya realizado en su nombre y «dejo en claro que jamás existió intromisión de un servidor o de personal a mi cargo en la campaña del candidato a Gobernador del PRI».
Asimismo, criticó la «perversidad» del equipo del panista Jorge Luis Preciado y su grupo parlamentario en el Congreso local porque «se dedicaron a fungir como orquestadores de una estrategia con el único propósito de manchar o torcer la elección y afectar a mi persona y al candidato del PRI».
«Necesitamos tener mucho cuidado en este momento de búsqueda de culpables, de no dar saltos al vacío, debemos pensar en el Colima próspero que todos queremos», concluyó.