A un mes de que policías estatales y federales atacaran el bloqueo que maestros de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) mantenían en la carretera de Nochixtlán, Oaxaca, dejando seis muertos y un centenar de heridos, no hay avances de la investigación ni atención a los heridos.
Según una declaración del padre de uno de los jóvenes fallecidos para Animal Político, “la gente está encabronada”, ya que funcionarios federales se han reunido con ellos, pero sólo hacen “promesas” sin llevar a cabo ninguna acción concreta.
A decir de otro de los afectados, “ninguna de las familias ha tenido apoyo psicológico, legal o económico”.
Una de las principales exigencias es la atención inmediata a los heridos, pero según los testimonios de los pobladores de Nochixtlán, aunque llegó una caravana de médicos, ésta lo hizo “sin medicamentos ni especialistas”.
Versión contraria a la de Luis Raúl González Pérez, presidente de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), quien al asistir al Senado de la República a una reunión de trabajo con la Comisión de Seguimiento a los hechos de Nochixtlán, declaró que todos los lesionados ya están dados de alta.
Ahí, el ombudsman nacional dio a conocer que en relación con los hechos ocurridos el mes pasado, llevan “502 actas circunstanciadas, entre quejas y testimonios. Se tienen 29 testimonios por lesionados con arma de fuego; diez testigos de los hechos en las inmediaciones del hospital comunitario; cuatro testimonios de los lesionados por gas lacrimógeno y el de un lesionado por fragmento explosivo”.
Por otro lado, aunque el pasado 6 de julio, la Procuraduría General de la República (PGR) atrajo el caso con el compromiso de realizar una “investigación integral, con profesionalismo y eficacia para esclarecer lo ocurrido”, no han dado una fecha para informar sobre los avances o conclusiones del caso.
(Con información de Animal Político y La Jornada)