Al aumentar la gasolina todo se eleva, comienza la temporada de calor usamos mas electricidad, empleamos más agua para regar el jardín y al final pagamos más servicios. Solo con los precios de la gasolina, el transporte al trabajo y el transporte a la escuela encárese.
Una familia de clase media baja y de cuatro integrantes ya solo podría imaginar ir a la playa en vacaciones, esta escapada sueña caro hasta en sueños. Dejar de salir a pasear conlleva un desgaste emocional, elimina la posibilidad de relajarnos y disfrutar en familia. En un lugar recreativo. Se ven comprometidas las aspiraciones a una vida mejor, a gozar del tiempo libre y la sana distracción y esparcimiento.
¿Entonces qué hacer? Mi propuesta siempre es la misma conocer tu entorno inmediato. Colima cuenta con ríos, playas, jardines y museos. Ya saben, la carne asada en el río, todos juntos brincando en el agua tomar bebidas refrescantes, “comer en bola” (como decimos aquí) salir a tomar los alimentos en un parque, bajo la agradable sombra de una parota un día de campo.
¿Qué te parece ir por una paleta de hielo hecha de frutas de temporada en el parque? ¡Tomar un tejuino ¡Las vacaciones son perfectas para salir un par de horas y sentarse a ver el atardecer algo muy común en Colima!
Quiero recordarles que uno de los derechos humanos más nobles, del cual podemos echar mano en vacaciones: Derecho del acceso a la cultura. Toda persona tiene derecho para acceder a la cultura y a sus beneficios, así como de disfrutar de sus bienes y servicios que presta el Estado en materia.
Y ¿cómo ejercer este derecho?
Visitando alguno o todos los museos de la ciudad de Colima, que hay en todo el estado, visitar parques, atractivos naturales, conciertos y obras de teatro gratuitas divertirse juntos en familia.
Así ponemos en práctica uno de los derechos de los cuales todavía podemos gozar especialmente en un país que cada vez restringe mas el respeto a los derechos humanos.
Sin embargo, es necesario notar que no todos los espacios museísticos son gratuitos, leyó usted bien, no todos, en Colima los espacios que privilegian el derecho del acceso a la cultura son:
- Museo de las Culturas de Occidente Ma. Ahumada de Gómez, que nos muestra el rico pasado arqueológico de las culturas de tumbas de tiro a las cuales pertenece Colima.
- Museo Fernando del Paso, que contiene una muestra de arte contemporáneo, puede ser foto, pintura, escultura de artistas emergentes.
- Museo de Arte Contemporáneo Jorge Chávez Carrillo, exposición temporal de arte contemporáneo.
- Galería del Museo Regional de Historia, que tiene una expo temporal para estas vacaciones presenta ilustración con el tema de la lucha libre. En este lugar el espacio que alberga la colección de piezas prehispánicas tiene costo. Los domingos por las tardes es gratis.
El resto de los lugares cuentan con boletos que van de los $10 a $60 pesos con descuentos que se ofrecen a los y las portadoras de credenciales de INSEN, INAPAN, ESTUDIANTE, MAESTRO, DISCAPACITADO. Los niños y niñas entran gratis.
Sería maravilloso el acceso al libre y gratuito a todo recinto cultural, a conciertos de música académica o tradicional, a muestras de cine o a talleres de oficio no que nuestro poder adquisitivo determine el arte al cual podemos tener acceso.
Sin embargo en estas crisis económicas uno de los rubros presupuestales más estrangulados, son los centros culturales, el arte. Sin duda alguna, el conocimiento tanto de nuestro pasado como de nuestro presente será ante los ojos del sistema un acto revolucionario, así que, haga un acto revolucionario, ejerzan uno de sus derechos humanos, y disfrute de sus impuestos al visitar museos gratuitos.
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Mónica Barajas
Secretaria de Proceder A.C.
Promotores de Derechos Humanos Asociación Civil