La delegada en Colima de la Procuraduría Agraria, María Elena Díaz, intenta bloquear las demandas de los comuneros de Zacualpan donde solicitan la renovación del comisariado de bienes comunales “a fin de ganar tiempo para que la empresa minera pueda instalarse”.
Así lo aseveró la organización ambientalista Bios Iguana a través de un comunicado de prensa.
Según información de la asociación, Elena Díaz se niega a celebrar una asamblea para renovar el órgano de representación comunal que actualmente preside Carlos Guzmán Teodoro, tal como lo demandaron por escrito 108 comuneros.
“La delegada manifestó que no emitiría ninguna convocatoria de destitución hasta que se depure el padrón de comuneros porque hay algunos que no tienen sus derechos vigentes”, señalaron.
Al respecto, afirman que el artículo 40 de la Ley Agraria permite al 25 por ciento de los comuneros solicitar la remoción de los miembros del comisariado pero la delegada “sin ningún argumento técnico jurídico” se niega a aceptarlo.
En ese sentido, lamentaron que ahora Elena Díaz se niegue a celebrar asambleas argumentando la falta de una depuración del padrón, pues ella nunca lo solicitó cuando acudió a asambleas pasadas para promover el proyecto minero.
Por esta razón, consideran que la delegada pretender dejar pasar tiempo para que se emitan los permisos correspondientes a favor de la empresa minera y “seguir con los ofrecimientos de 15 mil pesos, despensas, proyectos de piso firme, para el ojo de agua, reforestación, juguetes para niños, etc.”
Finalmente, reprobaron el presunto tono agresivo y las expresiones racistas y discriminatorias que empleó en reunión con los comuneros de Zacualpan al llamarlos “pobrecitos indígenas”. También criticaron que la delegada pretenda frenar el avance de las manifestaciones pidiendo el cese de la intervención de Bios Iguana en el caso.