El gobierno de México emitió una declaratoria de emergencia epidemiológica por la carga que representan el sobrepeso, la obesidad y la diabetes debido al incremento de muertes asociadas a dichos padecimientos, convirtiéndose a escala mundial en el primer país que toma una decisión de este tipo.
Pablo Kuri Morales, subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, refirió que entre el 2014 y 2015 la cifra de decesos pasó de 94 mil a 98 mil 450.
Entre las causas, dijo el funcionario, destaca que de las personas que viven con diabetes, en promedio sólo una cuarta parte tiene bajo control los niveles de glucosa en la sangre, mientras que la mayoría de los enfermos puede desarrollar complicaciones como falla renal, pérdida de la vista o amputación de ambas extremidades por insuficiencia circulatoria.
Ayer durante una conferencia de prensa Kuri Morales anunció la decisión que tomó el Comité Nacional de Seguridad en Salud – en el que participan 18 instituciones públicas- sobre la declaratoria de emergencia epidemiológica.
De acuerdo con información del Observatorio Mexicano de Enfermedades (Oment) se sabe que en los últimos seis meses en el Seguro Popular se identificó a un millón 21 mil personas con diabetes, pero sólo la mitad ha dado continuidad a un tratamiento.
En Guadalajara el secretario de Salud, José Narro señaló que con la declaratoria de emergencia se dará “gran visibilidad” al problema y habrá coordinación entre las instancias de gobierno federal y locales con el fin de disponer recursos para la prevención y tratamiento de la diabetes.
“Cuando uno suma factores de riesgo a la obesidad, como tabaquismo, alcoholismo, los estilos de vida y la mala alimentación, ahí están los verdaderos enemigos de la salud en México” expresó.
Por su parte, el director del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) Mikel Arriola durante una gira de trabajo por Monterrey para conmemorar el Día Mundial de la Diabetes indicó que a partir del 2017 con el nuevo modelo de atención a clínicas harán cohortes poblaciones para identificar a los grupos con riesgo de enfermar.
Una vez identificados se les invitará a que acudan a la revisión de Prevenimss y realizar el diagnóstico de las enfermedades y controlarlas o atenderlas, según sea el caso con la intención de llegar antes que los padecimientos se materialicen.
Indicó que una personas con diabetes bien controlada causa un costo de alrededor de 100 pesos al año, mientras los pacientes que ya están en tratamiento de hemodiálisis por falla renal al año cuesta 320 mil pesos al sistema de salud.
Víctor Hugo Borja, titular de la Unidad de Atención Primaria a la Salud del IMSS informó que en éste Instituto se tiene registro de 3.8 millones de pacientes con diabetes, de los cuales 40 por ciento mantiene controlados los niveles de glucosa y un 30 por ciento deja de asistir a consultas médicas.
Además, han registrado al año 21 mil muertes en sus hospitales por esta enfermedad y otros 6 mil derechohabientes no hospitalizados fallecen por la misma causa.
Respecto al Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (Issste), Rafael Navarro, director médico del Instituto informó que se han identificado 580 mil personas con esa enfermedad, de las cuales el 65 por ciento reporta niveles de glucosa aceptables.
Kuri Morales planteó que es urgente hacer conciencia en la sociedad, para que si las personas tienen exceso de peso y/o familiares con diabetes, acudan a clínicas familiares o centros de salud, donde se les realizarán las pruebas clínicas para descartar la presencia de la alteración metabólica.
Algunas de las acciones que se realizarán a partir de la declaratoria de emergencia sanitaria son: capacitación y sensibilización del personal de salud para que promuevan el cambio de estilo de vida; nuevas campañas de información y se iniciará la operación del índice de calidad de la atención del paciente diabético.
Asimismo, se garantizará el abasto de medicinas, equipos e insumos para realizar las pruebas de detección y control de diabetes.
Según Kuri Morales, la meta para el 2018 será lograr que 35 a 40 por ciento de los pacientes alcancen el control metabólico.
(Con información de La Jornada)